LA ISLA

LA ISLA

Por Virgilio Rodríguez Castro.

3 de diciembre del 13.

"Con sincera  admiración"

V.R.C.

Si yo tuviéra cien años menos no solo no lo hubiéra pensado dos veces para inscribirme en "La Isla 2013", porque estoy cierto de que hubiéra hecho un buen papel tanto por mis conocimientos prácticos y mis habilidades físicas como por mis fortalezas en la juventud sino, además, hubiéra cortejado a Ceci -en esas circunstancias- porque, es un portento de hembra a mi juicio, de las que pueden pensarse como el prototipo viviente de la Señoras del siglo XXI.

Hay cosas que parecieran lógicas en esto de hacer cosas, como el fuego por ejemplo con pedazos de pedernal o como en el caso de la competencia con una pieza de pedernal y un cuchillo de lo que se sabe, sin tener que ser un hombre o mujer de campo que la chispa para que brinque o brote, ha de ser golpeando las dos piezas y no hacer frotando como si se tratara de afilar el cuchillo, que fue lo que hicieron los que no ganaron el brazalete de salvación.

Amén del "sentido común" hay cosas que definitivamente escapan al raciocinio citadino y así como ellos, según ellos los citadinos, le miden la zanca al pollo este -el campesino- nomás se los echa al morral.

Y este es el caso, porque, evidencian, a todas luces, en el curso de las pruebas, cuan alejados estamos de las faenas campiranas que nos fueran útiles para la sobrevivencia o salvar el pellejo en un momento dado -muchas, que no sé si se detectaron-.

Por lo que, finalmente -aunque sabemos no gano la final-, no podemos menos que admirar sinceramente a quien como ya dije fue capáz de sortear dignamente -sin pactos tras los matorrales- en buena lid con categoria de mujer de hoy  con inteligencia, carácter y determinación el reto al tú por tú, demostrando además ser una legítima mujer sexy al natural, transparente, pequeña de una sola pieza ganándose así -la camioneta- nuestra irrestricta admiración y absoluto respeto.

V.R.C.